Una añada excelente en la Rioja. Con un otoño suave e un invierno frío y lluvioso, comenzó la época vegetativa con los recursos suficientes para que se desarrollara la vid de una manera perfecta. Durante este periodo no se produjeron ninguna incidencia de plagas y enfermedades hasta el final del ciclo. En vendimia no se produjeron lluvias significativos con lo que el estado sanitario de las mismas y la maduración fueron excelentes. Un gran año donde los grandes vinos criados se podrán guardar durante mucho. Perfecto equilibrio entre los taninos más amables y una buena acidez que aportan a los vinos una extraordinaria longitud.
Después de muy buenos años, el 2010 se caracterizó por ser la añada perfecta. Un ciclo vegetativo óptimo y sin incidencias en el estado sanitario de la viña. Acompañado de un buen cuajado del fruto y una lenta maduración, la vendimia se produjo en un magnífico estado y con una moderada producción. Un gran año con un excelente potencial de envejecimiento que dan como resultado unos vinos especiados y afrutados, con una muy buena estructura y acidez.
Cata a la vista
Rojo picota intenso y limpio. Cata en nariz
Aromático y frutal, con matices de la crianza. Cata en boca
Concentrado y estructurado. De buena tanicidad, es equilibrado y redondo. Gran personalidad y caracter.
Cata a la vista
Color rojo cereza con tonos teja. Cata en nariz
En nariz presenta aromas frutales muy intensos pero sutiles. Cata en boca
En boca, se presenta fino, elegante y aterciopelado. Taninos maduros. Final persistente.
Cata a la vista
Color amarillo ligero con reflejos verdosos.
Cata en nariz
Aroma varietal resaltado, complejo y elegante. Cata en boca
Buena estructura, calido, con cuerpo, untuoso. Final de boca frutal, largo y persistente.
Cata a la vista
Color amarillo ligero con reflejos verdosos.
Cata en nariz
Aroma varietal resaltado, complejo y elegante. Cata en boca
Buena estructura, calido, con cuerpo, untuoso. Final de boca frutal, largo y persistente.