Rumbo al Norte 2017 es un vino tinto fluido y complejo que en nariz ofrece aromas que recuerdan al perfume de rosas y a las frutas frescas acompañados por notas cítricas y minerales. En su paso por boca expresa matices florales, frutales y especiados. Un vino de elegancia borgoñona y limitadísima elaboración.
Este gran año nos ha dado la oportunidad de poder disfrutar de uno de los parajes más impresionantes de Comando G. Algo menos de media hectárea plantado con Garnachas viejas a una altitud de 1200 metros. Este vino es un manifestó hacía la pureza atlántica y mineral de los vinos. Un vino delicado en colores y en aromas pero con un agarre especial en boca. Una textura austera que se ira agrandando a medida que pasen los años. Uno de los grandes vinos de Garnacha del mundo.
Cata a la vista
Rojo cereza y lágrima consistente. Cata en nariz
Nariz compleja. Fruta roja como granada, frambuesa, grosella. Notas florales, monte bajo, tabaco, café, mineral. Cata en boca
Buena enrada en boca. Potente, pero muy elegante. Fresco y con taninos suaves. Sensacines en el retrogusto a fruta, minerales y especias.
Muy persistente.
Cata a la vista
Color rojo rubí intenso con leves tonos violáceos. Limpio y brillante. De capa media, tiene una fina lágrima de caída ágil y ligeramente tintada. Cata en nariz
Nariz limpia de intensidad media-alta en la que destaca una fruta roja, intensa que poco a poco da paso a una complejidad muy armónica. Aromas tostados, notas florales, agradables recuerdos especiados, intensas notas balsámicas, hierbas aromáticas, recuerdos terrosos y de fondo, una elegante mineralidad. Cata en boca
En boca, como en nariz, es complejo y elegante. Entrada potente, recorrido marcado por la misma fruta roja, ahora un tanto licorosa matizada por intensos tostados, una buena acidez y una sensación tánica bien marcada. Es largo y muy persistente, con potentes notas ahumadas y minerales en retronasal.