Hacienda Monasterio 2017 es un vino tinto concentrado con intensos aromas de fruta roja, notas minerales y un fondo herbáceo con toques especiados. En boca es complejo, sedoso y equilibrado. Presenta unos taninos pronunciados que dan estructura y frescura. El final es largo y persistente. Un vino con muy buen recorrido en botella.
Después de un invierno seco, la primavera vino cargada de lluvia, permitiendo almacenar ésta agua que se hizo muy necesaria durante todo el verano extremadamente seco. Las bajas temperaturas durante la primavera retrasaron el brote de la vid, empezando el ciclo vegetativo con retraso. Un retraso que se fue regulando debido a las altas temperaturas registradas en julio y agosto, hasta el punto de retrasar la maduración en aquellos viñedos más jóvenes.La vendimia 2016 batió el récord de producción de la añada 2014, y no solo en producción también en calidad debido a las inmejorables condiciones climáticas y la excelente sanidad de los viñedos.Los vinos de esta añada se presentan con mucho volumen, con buena capacidad para afrontar el tiempo, con redondez y un tanino espectacular. Una cosecha que recuerda a las de finales de los 80 y principios de los 90.
Hacienda Monasterio 2015 refleja la excelente añada que se produjo en Ribera del Duero Una perfecta maduración y concentración de la uva, perfecta para una crianza prolongada en barrica. Como resultado tenemos un vino tinto concentrado y estructurado, donde se pueden apreciar la fruta negra y el carácter tánico aportado por la barrica que se irá puliendo a lo largo de los años.
Después de un buen agostamiento en un invierno suave, el cálido inicio de la primavera adelanto la brotación casi 10 días. El verano, bastante fresco y seco, ha permitido una buena evolución del ciclo vegetativo y una maduración equilibrada. Una añada sin contratiempos. Destacar la elevada producción de esta añada debido al buen comportamiento climático durante la vendimia.Los vinos de esta añada presentan gran intensidad de color, mucha expresión frutal en nariz y en boca destaca su equilibrio y el potencial tánico, características que nos muestran el gran potencial para elaborar grandes vinos de guarda y para elaboraciones más ligeras y afrutadas.
Estamos frente una añada complicada, aunque la brotación de la vid se adelantó brevemente , las bajas temperaturas registradas durante la primavera retrasaron el ciclo vegetativo que ya no se recuperó en el verano, a pesar de tener un julio cálido.La vendimia se desarrolló de forma acelerada, y con un esfuerzo extra por parte de los viticultores descartando el fruto que no reunían las condiciones óptimas, asegurando así evitar la posible incidencia de los ataques de botritys debidos a las lluvias sufridas en estas fechas.Los vinos de esta añada, calificada como buena, muestran buena intensidad de color, gran expresión frutal y mucho frescor.
Cata a la vista
Granate intenso y atractivo con reflejos violáceos. Cata en nariz
Intensa y muy compleja. Aparecen abundantes aromas de fruta roja y negra sobre un fino fondo tostado, con ciertos matices minerales, especiados y balsámicos. Cata en boca
Entrada potente y afrutada. De paso más suave, sedoso, deja agradables sensaciones de fruta roja madura con exquisitos matices minerales. Taninos pulidos y acidez muy bien equilibrada. Un vino estructurado y de gran elegancia.
Cata a la vista
A la vista presenta un bonito color granate, algo brillante. Cata en nariz
De gran complejidad aromática. Regaliz, grosellas y algunos recuerdos minerales, todo ello arropado por notas de la crianza en barrica. Cata en boca
En boca resulta un vino suave y muy sedoso. Taninos muy nobles, pulidos. Mucha fruta, toques minerales y una acidez muy equilibrada.
Cata a la vista
Intenso color rubí oscuro. De capa alta, tiene un aspecto limpio y brillante Cata en nariz
Es una nariz de intensidad elevada. Emana unos generosos aromas de fruta negra y notas minerales junto con un sutil recuerdo de violetas y regaliz negro. De fondo aparecen agradables y nobles maderas. Cata en boca
En boca tiene una gran textura, un recorrido marcado por una fruta nítida y fresca (ciruela, fresa), muy bien integrada con la acidez y unos taninos suaves que se hacen notar suavemente en la parte superior del paladar. Final largo, afrutado y persistente. Es un vino tinto con una gran capacidad de guarda.
Cata a la vista
Intenso color rubí oscuro. De capa alta, tiene un aspecto limpio y brillante Cata en nariz
Es una nariz de intensidad elevada. Emana unos generosos aromas de fruta negra y notas minerales junto con un sutil recuerdo de violetas y regaliz negro. De fondo aparecen agradables y nobles maderas. Cata en boca
En boca tiene una gran textura, un recorrido marcado por una fruta nítida y fresca (ciruela, fresa), muy bien integrada con la acidez y unos taninos suaves que se hacen notar suavemente en la parte superior del paladar. Final largo, afrutado y persistente. Es un vino tinto con una gran capacidad de guarda.
Cata a la vista
Rubí brillante muy oscuro. Cata en nariz
Sus aromas son complejos, predominando la fruta sobre la madera. Encontramos notas minerales y de tostados. Cata en boca
En boca se muestra sedoso y con taninos jóvenes que dan paso a un final largo con recuerdos de madera y la fruta que se irán integrando con el tiempo.