Vinos del Douro

Historia del vino en la zona

En la Región Vinícola del Alto Douro se elabora vino desde hace más de dos mil años. Durante la época romana ya se cultivaban vides en aquellas extraordinarias laderas escarpadas testigos del paso del Río Douro (Duero) donde antaño todo era esfuerzo y violencia, situación que se fue regularizando y que ha evolucionado con el paso de los años. Douro fue la primera región vinícola que, en el año 1756, fue demarcada y regulada gracias al Marqués de Pombal, lo que constituye todo un hito histórico para la enología y viticultura mundial. La zona cobró fama internacional gracias a los extraordinarios vinos de Oporto, pero no todo en el Douro se limita a la elaboración de vinos generosos. Esta región portuguesa es hoy por hoy una de las denominaciones de origen más reconocidas del país gracias a la altísima calidad de sus vinos tranquilos. El Douro cuenta además con uno de los paisajes más asombrosos del mundo. Tan es así que el Alto Douro fue reconocido en el año 2001 como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Es, sin duda, una de las regiones vinícolas más hermosas del mundo donde se puede experimentar la grandeza de un paisaje cultural, evolutivo y vivo y disfrutar de su impresionante belleza.

Variedades de uva

No es novedad explicar que Portugal es uno de los países que cuenta con más castas autóctonas de uvas, alrededor de 500. La región del Douro es una de las más ricas en variedades locales que se mezclan en los viejos viñedos pero que en las parcelas modernas se suelen cultivar por separado. Entre ellas destacan las siguientes: tinta roriz (tempranillo), touriga franca, touriga nacional, tinta barroca y tinta cão, utilizadas especialmente para la elaboración de los vinos de Oporto. Entre las variedades blancas destacan las siguientes: arinto, codega, rabigato, gouveio, malvasía, viosinho o moscatel.

También se han comenzado a plantar, sobre todo en la parte alta del valle del Douro, uvas como la tinta cabernet sauvignon y las blancas sauvignon blanc o gewürztraminer.

Localización, clima y suelos

La Región Vinícola del Douro se sitúa al nordeste de Portugal y está rodeada por las sierras de Marão y Montemuro. Se extiende por el cauce del río Douro a lo largo de 13 municipios, trayecto que cubre desde la frontera con España hasta un poco más allá de la ciudad de Oporto, en total 250 mil hectáreas donde se cultivan alrededor de 40 mil hectáreas de viñedo cuyas dos terceras partes están plantados en las laderas escarpadas que acompañan el trayecto del río y de algunos de sus afluentes.

Allí predomina el clima templado, con inviernos rigurosos, veranos muy calurosos y lluvias moderadas.

Las parcelas se componen principalmente por suelos de esquistos pero también se puede encontrar material granítico.

En la Región Vinícola del Douro se practica una verdadera viticultura heroica. Es todo un espectáculo contemplar los viñedos descendiendo desde la cima de las montañas hasta los valles que forman la orilla del río Douro.

Clasificación y regiones

El Douro es rico en microclimas debido a su accidentado relieve, por ello la región se divide en tres subregiones:

Baixo Corgo, que es la subregión más fresca, lluviosa y fértil, gracias a la influencia de la Sierra de

Marão.

Cima Corgo, región que constituye el corazón del Douro y donde se encuentran muchos de los viñedos de los que nacen las uvas destinadas a los vinos de Oporto, pues es una zona donde las uvas generan una mayor concentración de azúcar.

Douro Superior, que es la región más extensa y menos escarpada del Douro, donde el clima es más cálido y seco.

En estas tres regiones se elaboran vinos blancos, tintos y rosados de calidad, vinos espumosos, generosos y licores.

Los mejores tintos que se elaboran en el Valle del Douro suelen ser afrutados y de cuerpo equilibrado, con aromas que recuerdan a los vinos generosos de Oporto, acompañados por taninos firmes y fresca acidez.

Por otra parte, sus vinos blancos, aquellos que nacen en viñedos de altura, son vinos de gran frescura debido a su punzante acidez que se equilibra con la presencia frutal. Tal como sucede con la viticultura de los vinos generosos de Oporto, la mano de obra para llevar a cabo la viticultura en el valle del Douro resulta cara, pero este cuidado al vendimiar en situaciones extremas, seleccionar y tratar la fruta da lugar a vinos de gran calidad.

En la Región Vinícola del Douro conviven dos denominaciones de origen y una indicación geográfica protegida y son las siguientes: DOP Douro y DOP Porto y la IGP Duriense.

Mención especial merece el vino de Oporto, todo un ícono de la viticultura mundial y tesoro nacional de Portugal, que se distingue por su gran variedad de estilos, alta persistencia de aromas, un amplio abanico de intensidades y dulzuras, su alta graduación alcohólica y su extraordinaria longevidad. Vinos que son, sin duda, joyas de la enología internacional a las que se destina el 50% de la producción del viñedo en la Región Vinícola del Douro.

El resto de la producción se utiliza para la elaboración de vinos de alta calidad. En las últimas décadas los vinos tranquilos de Portugal han ganado importancia y cada vez son más reconocidos y buscados a nivel internacional.

Algunas bodegas destacadas

Niepoort

Una bodega familiar con más de 150 años de historia. Cinco generaciones han trabajado para conseguir que sus elaboraciones, vinos tranquilos y generosos de excelente calidad, sean conocidos en todo el mundo ¡y lo han conseguido!. Actualmente es Dirk Niepoort quien dirige la bodega, toda una personalidad en el mundo del vino y quien fue capaz de demostrar que no solo de vinos generosos vive Portugal. Niepoort, además de elaborar grandes vinos de Oporto, es el artífice de vinos blancos y tintos que son todo un referente en su tierra, vinos con personalidad y un estilo imposible de imitar.

Luís Seabra

Esta bodega lleva el nombre de su creador, un enólogo portugués que se formó con Dirk Niepoort luego de 12 años trabajando en la bodega Niepoort. Indudablemente Luís Seabra ha sido un buen discípulo, sobre todo en lo que respecta a la elaboración de vinos tranquilos que crea bajo su propio estilo. Tintos y blancos que expresan sin maquillaje la verdadera cara del viñedo y de las variedades portuguesas. Vinos auténticos, refinados y sorprendentes que vale la pena conocer.