L’Ermita 2019 es el gran vino de Álvaro Palacios. Un vino tinto cautivador, realmente excepcional y difícil de describir. En nariz es muy expresivo, ofrece una gran riqueza aromática donde aparecen frutas maduras, flores, mineralidad y frescura. En boca se materializa el milagro. Embriagador y perfecto, sutil y equilibrado. Un vino tinto que capa tras capa ofrece sensualidad, energía, elegancia y un final interminable.
L’Ermita 2017 es un vino tinto misterioso y de belleza inexplicable que en nariz nos ofrece notas cítricas y de fruta en compota, con una delicadeza floral adornada con una sutil pincelada mineral. Su paso por boca es aterciopelado y sabroso. Un vino con una elegancia, sensualidad y complejidad indescriptibles. El gran clásico de Álvaro Palacios.
L'Ermita se presenta en boca muy sabroso, especiado. Con grandes taninos muy afinados, tiene un gran recorrido con un largo final.
Color cereza muy intenso.
En nariz encontramos aromas de hierbas de monte, especias, fruta roja madura y tostados.
Entrada poderosa, muy amplia, envolvente. Paso aterciopelado, elegante, muy sabroso, con la fruta muy concentrada y bien equilibrada con las notas de la madera. Buena acidez y taninos muy integrados. Un vino complejo y elegante. Final muy largo y persistente, con recuerdos de la mineralidad, del terruño. L'Ermita es un maravilloso
vino tinto, la más pura expresión de las "pissarres" del Priorat.
Intenso color cereza picota con ribetes granates. Brillante, muy cubierto, con abundante lágrima.
Nariz intensa y explosiva. Aromas seductores a fruta negra conjugada con elegantes y finas maderas sobre una profunda mineralidad.
Entrada muy amplia, envolvente. Paso aterciopelado, muy sabroso, con la fruta muy concentrada y bien equilibrada con las notas de la madera. Buena acidez y taninos muy integrados. Un vino complejo y elegante. Final muy largo y persistente, con recuerdos de la mineralidad, del terruño.
L'Ermita es la pura expresión de las "pissarres" del
Priorat.
Intenso color picota púrpura con ribetes anaranjados. Brillante. Muy cubierto y lágrima densa.
Profundo e intenso en la nariz. Ahumados y fruta inicialmente que al abrirse toman una gran intensidad y potencia, sobretodo la fruta roja y negra que aparecen bien maduras. Muy buenos tostados de la madera, bien integrados, que junto a la ligera mineralidad le dan mucha elegancia.