Cada familia tiene su propia historia; pero ninguna igual a la de la familia Freixa-Rigau: la pasión por el vino, el arrojo de crear un negocio en plena Guerra Civil, la aventura de crear una familia y la valentía de continuar con este legado hoy en día es algo de lo que solo pocos puede presumir (aparte de esta familia). Actualmente, bajo el nombre de Grupo Oliveda, esta saga (que ya va por su tercera generación), continúa elaborando espumosos. Siempre mirando al futuro, pero sin olvidar sus raíces. Por eso existe Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature, un espumoso con más de 36 meses de crianza.
Justo en la ladera de la montaña de Albera, en el municipio de Capmany, es donde se encuentra la finca donde nace Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature. En concreto esta zona destaca por la composición de sus suelos, donde abunda el granito, así como por el viento de Tramuntana, que se deja notar con bastante frecuencia entre las cepas de garnacha, cariñena, cabernet, syrah, merlot, sauvignon blanc y chardonnay. A todas estas variedades se les unen otras más tradicionales, como la macabeo, la parellada y la xarel·lo. Estas tres últimas son con las que se elaboran Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature.
En este sentido, la vendimia de Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature es uno de los puntos claves del proceso. Su punto de madurez es crucial, teniendo en cuenta que siempre hay que conseguir el nivel correcto de acidez que da esos toques tan característicos e inconfundibles de los espumosos de la D.O. Cava. Una vez que este se ha conseguido, la uva se vendimia y se lleva a la bodega, donde Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature se despalilla y se prensa, consiguiendo el mosto. Aquí hay que aclarar que las tres variedades que forman parte del proceso de Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature se trabajan por separado, ensamblándose posteriormente. Una vez obtenido el mosto, Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature comienza a fermentar, consiguiendo el vino base. Este supondrá el primer trabajo por parte de las levaduras, que volverán a entrar en juego durante la segunda fermentación en botella. Esta se produce gracias aparte del licor de tiraje (hecho de mosto y azúcar) que se añade tras el embotellado y que servirán de alimento para esas levaduras que actúan dentro de la botella.
Con estas maravillosas burbujas, Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature estará preparado para encarar la larga crianza de 36 meses que le esperan en las bodegas de crianza. Durante todo este tiempo Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature se mantendrá en posición horizontal —esto es lo que se conoce como rima—, asegurándose que todo el vino esté en contacto con las lías (levaduras muertas que han quedado dentro de la botella). Para ello, se realizarán periódicamente removidos, donde la botella se irá girando hasta alcanzar su posición vertical. De esta forma se consigue que esas lías se desplacen hasta el cuello de la botella, quedando listas para otro paso fundamental: el degüelle, donde se destapa la botella y se expulsan las lías, consiguiendo que el líquido quede limpio y brillante.
Por último el volumen que se pierde en Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature será repuesto con el licor de expedición. Este paso también será muy importante, ya que dependiendo de la cantidad de azúcar que contenga este líquido se determinará el perfil de cada espumoso. En el caso de Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature no se añadirán más de 3 gr/ l de azúcar, manteniendo su sabor seco y perfilado.
Cada copa de espumoso Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature es mucho más que eso. Es un homenaje a la perseverancia, a la pasión y a la historia de toda una familia. ¡A brindar por ellos y su legado con Freixa Rigau Mil·lèsima Reserva Familiar Brut Nature!