Dasca Vives Vi Vermell

No es la primera vez que un joven viticultor asume el control de la finca familiar para preservar su legado. Sin embargo, Josep Dasca no se detuvo ahí. Cuando llegó a sus manos el libro del filósofo alemán Rudolf Steiner, considerado el padre de la biodinámica, todas las prácticas realizadas hasta entonces se vieron cuestionadas. A partir de ese momento, a pesar de comprender el concepto de trabajar las tierras de forma ecológica, quiso ir más allá y hacer de la biodinámica el pilar de su proyecto. Como él mismo explica: "Trabajar para vivificar la tierra, no para agotarla". De esta manera, los productos que la tierra le proporciona, como el vino, el aceite, las almendras y los cereales, adquieren un valor añadido y, al mismo tiempo, le permiten vivir de lo que el campo puede ofrecer.

En busca del potencial de cada variedad, nos presenta vinos vivos y auténticos tales como Dasca Vives Vi Vermell, un coupage de tempranillo y cabernet sauvignon procedente de cepas de 10 y 60 años. Se trabaja de forma ecológica, sin insecticidas ni fungicidas, y se aplican extractos de plantas para fortalecerlas y, afrontando posibles problemas desde el origen. La vendimia es manual en cajas pequeñas y, una vez en bodega, las uvas fermentan de forma espontánea en depósitos de acero inoxidable con levaduras autóctonas. Después, el vino permanece sobre lías unos meses y, finalmente, se embotella sin adición de clarificantes.

Inspirado por el legado de su finca familiar y la filosofía de Rudolf Steiner, Josep Dasca ha llevado su pasión por la viticultura más allá de lo convencional. Su compromiso con la biodinámica ha transformado no solo sus prácticas agrícolas, sino también la esencia misma de los productos que cultiva. Resultado de una cuidadosa atención y respeto por la tierra, Dasca Vives Vi Vermell encarna la esencia de esta visión de nueva generación.