Clos des Centenaires Roussanne blanc

La roussane y la marsanne forman el matrimonio perfecto. Muy a menudo estas dos variedades blancas, originarias del Valle del Ródano, son mezcladas para conseguir vinos secos o espumosos de gran cuerpo. Una de ellos es Clos des Centenaires Roussanne blanc.

La bodega Clos des Centenaires, localizada en Vauvert (en el sureste de Francia), es la creadora de este vino que nace bajo la A.O.C. Costières de Nimes. La supervisión de los viñedos - situados entre el Ródano, Cévennes y Camargue-, correrán a cargo de sus dos propietarios, Luc Baudet (Château Mas Neuf) y Bruno François (Clos des Américains). En esta zona las cepas crecen sobre suelos de guijarros sobre tierras arcillo-caliza e influenciadas principalmente por dos factores: por un lado, el fuerte viento Mistral; por el otro, el efecto de convección que limita el contraste de temperaturas. En concreto este fenómeno ocurre cuando las frías brisas marinas del Mediterráneo (a unos 20 Km) entran en contacto con los guijarros del suelo, que retienen el calor. Esto provoca que la oscilación entre el día y la noche sea más suave, asegurando con ello que las uvas no se deshidraten y alcancen muchos grados baumé (susceptibles luego en convertirse en grado alcoholicos). Esto consigue vinos de una frescura, casi exclusiva de la denominación. En cuanto al trabajo y la viticultura todo se realiza de forma manual y natural.

En bodega Clos des Centenaires Roussanne blanc pasa directamente a la prensa para luego ser trasegado a una depósito de frío, donde por unas horas conseguirá eliminar los lodos y las sustancias herbáceas. Esto conseguirá un mosto limpio que tras la fermentación - en foudres de 10 Hl a partir de levaduras autóctonas-, darán vinos de mayor calidad. La maduración de Clos des Centenaires Roussanne blanc se realizará aquí mismo, en cavas con temperaturas controladas. Una vez que haya obtenido todo su potencial, se embotellará en la propiedad.