Una Sobremesa inolvidable. ¿Te atreves?
Ya los romanos la ponían en práctica y, actualmente, es uno de los momentos más esperados después de la comida en días festivos. Costumbre genuina española —de hecho su término en castellano no encuentra traducción a otros idiomas— la sobremesa es una costumbre religiosamente respetada a lo largo del año, y que cobra especial importancia en Navidad. Justamente tras la comida, mientras se pica algo de postre acompañado de alguna bebida, este impasse es el momento perfecto para charlar y debatir de (casi) cualquier tema mientras se reposa la comida.
Si nunca lo has puesto en práctica, déjanos hacerte varias propuestas para que la primera vez sea inolvidable. Si, por el contrario, ya sabes de lo que te hablamos y tienes experiencia en esto, aquí van algunos consejos para evitar que se te atragante uno de los momentos más familiares de estas fiestas.
Para los clásicos
Presente en todos los países, el anís es siempre una apuesta segura. Sea con el nombre que sea (Pastis en Francia, Ouzo en Grecia, Raki en Turquía), esta hierba destilada, que ya se cultivaba en el antiguo Egipto, ha dado como resultado una de las bebidas indispensables durante estas Fiestas. ¡Eso sí! Cuidado con la resaca del día después.
Consejo
Ideal para acompañar los típicos dulces navideños. Para potenciar el sabor, prueba a añadir una pequeña cantidad a la receta de cualquiera de tus postres. Esto le dará un toque inigualable.
Nuestra recomendación
Anís del Mono Dulce 150 aniversario Edición de Lujo 70 cl
Para los nostálgicos
Hace varios siglos el brandy o Cognac (en su versión francesa) era una de las bebidas más consumidas en el mundo. Sin embargo, con la irrupción de nuevos destilados este aguardiente, obtenido de la destilación de la uva, fue decayendo hasta quedar relegada al baúl de los recuerdos. No obstante, cuál ave Fénix, el brandy resurge de sus cenizas con nuevas recetas y elaboraciones mucho más accesibles.
Consejo
Este destilado siempre ha encontrado en el chocolate su pareja perfecta; no obstante, si no eres mucho de dulce, puedes continuar con opciones saladas, como el jamón ibérico. Prueba también a mezclarlo en una coctelera con zumo de limón, azúcar líquido, una clara de huevo y tendrás un Brandy Sour. ¿Aún sigues pensando que el brandy está pasado de moda?
Nuestra recomendación
Para los aventureros
En 1918 el joven Masataka Taketsuru, experto en la elaboración de sake, llegó a Glasgow (Escocia). Su misión era aprender a elaborar whisky. Y consiguió ser pionero en la producción de la versión japonesa de este destilado que se convierte en una de las opciones más especiales por dos motivos: su cuidada elaboración (con agua de manantial destilada a fuego lento) y su envejecimiento en barricas de roble blanco japonés (mizunara). Mentalmente, estarás al otro lado del mundo cuando tu cuñado cuente la misma historia de todos los años por enésima vez.
Consejo
De nuevo, una vez más, y siempre con permiso de la cocina japonesa, el chocolate (especialmente el amargo) se convierte en la combinación perfecta. No pases por alto la fruta, especialmente la manzana y la pera, que conjuntan a la perfección con las notas avainilladas y dulces que este tipo de whiskies.
Nuestra recomendación
Hakushu 12 Años Japanese Single Malt Whisky
Para los indulgentes
Sí, ya sabemos que el último recuerdo que tienes del tequila no es muy bueno. Pero te pedimos que hagas un esfuerzo y olvides el último chupito que te tomaste en aquel garito de turno para darle una nueva oportunidad. Nada de brindis ni prisas. Simplemente, un vaso, una botella y todo el tiempo del mundo para degustar uno de los destilados más desconocidos (técnicamente hablando), cuya calidad suele pasar desapercibida. Desde su versión más básica, hasta la complejidad de los tequilas reposados y tequilas añejos. Estamos seguros de que cualquiera de las opciones te conquistará.
Consejo
Olvídate de la sal y el limón, y cátalo directamente, a temperatura ambiente, disfrutando de los aromas que desprende. Sírvelo en una copa de balón o de brandy, ideales para preservar las notas olfativas. Créenos que te sorprenderá.
Nuestra recomendación
Para los golosos
Los vinos dulces tampoco pueden faltar sobre tu mesa. Su maridaje es fácil: cualquier postre cabe bajo el paraguas de esta opción que empieza a conquistar también el terreno de los aperitivos. ¡No apto para diabéticos!
Consejo
Si las opciones más clásicas te aburren, prueba a sustituir los vinos más densos y concentrados por otros más ligeros, como la podredumbre noble de los Tokaji (Hungría) y los Sauternes (Francia), o una botella de cualquier vino de la D.O. Xerez-Sherry, elaborado con uvas pasificadas.
Nuestra recomendación
Para los responsables
Durante la temporada navideña los destilados sin alcohol siguen consolidándose como una de las opciones más sabrosas. Poco a poco las grandes casas y bodegas dan respuesta a un mercado mucho más consciente y exigente, ofreciendo la misma calidad y el mismo sabor de siempre innovando con las versiones desalcoholizadas de sus clásicos.
Consejo
Las ginebras han abierto un gran abanico, con cientos de opciones. Pero eso no es todo. El whisky, el ron y los licores tampoco se quedan atrás. ¡No los pierdas de vista!
Nuestra recomendación
Para los chocolateros
No importa que haya sobre la mesa. Ya puede ser el mejor postre del mundo. En tu corazón solo hay lugar para una opción: el chocolate en cualquiera de sus variables. Como buen chocolate lover sabrás que este alimento marida bien con casi todo; sin embargo, siempre hay un capítulo reservado para los vinos de Oporto. Ya sea blanco o tinto, esta combinación ha sido históricamente una pareja ganadora, ya que el comercio de ambos productos han sido siempre bases de la economía portuguesa.
Consejo
A la hora de la verdad es superimportante asegurarse del grado de pureza del chocolate, puesto que siempre buscaremos el contraste. Cuanto más amargo sea el chocolate, más cuerpo deberá tener el vino (y viceversa).
Nuestra recomendación
Como verás, más allá de una tradición, la sobremesa es todo un arte donde entran en juego muchas variables. Sin embargo, no te agobies. No hay que ser un maestro. Al final, la opción que elijas es lo de menos; lo más importante es saber disfrutar de la compañía y de la magia del momento.