Descubriendo a Nacho Martinez, el experto en vinos de Decántalo
No hay botella que pertenezca a la oferta de vinos y espumosos de Decántalo que Nacho Martinez no conozca o no haya probado. Por sus venas corre un intenso entusiasmo por el vino, una emoción por descubrir y compartir aquellas “botellas unicornio” que se encuentra por el camino, cuando viaja en su furgoneta o pedalea en su bicicleta a través de viñedos de aquí y de allá.
“Pistacho”, como le conocemos principalmente en el mundo vinícola, es el artífice de la internacionalización del catálogo de Decántalo, también es un guía de viaje que acompaña a nuestros wine lovers por países, regiones y variedades a través de las selecciones de vino que diseña para que nuestros clientes puedan disfrutar de muchas y distintas experiencias vinícolas. Botellas seleccionadas con mimo, con la pasión sincera de quien se emociona gracias a una copa de vino.
Además de ser el ganador del 15º Premio Vila Viniteca de Cata por Parejas en 2023 (junto a Eloi Cedo), este Técnico Superior en Vitivinicultura vasco además colabora en la elaboración de dos interesantes vinos rosados que nacen en las bodegas 4 kilos y Comando G, que han sorprendido a los catadores de Parker.
Conozcamos un poco más sobre Nacho Martinez, el Responsable de Compras y Catálogo de Decántalo.
- Para ti, ¿qué es el vino?
Es una forma de expresión entre las personas y el territorio. Es también una emoción compartida, sobre todo después de haber bebido unas buenas botellas.
- ¿Cuál es el primer recuerdo que tienes relacionado con el vino?
Cuando venía mi padre con la cuadrilla de La Rioja con vino a granel y lo embotellaban en la terraza de casa.
- Los que te conocemos un poco más de cerca sabemos que tu entusiasmo por el vino es parte fundamental de tu ADN. ¿Te imaginas vivir sin él? ¿Con qué lo sustituirías?
Sinceramente, no. En todo caso, lo complementaría con la música.
- Eres un entusiasta del vino “todoterreno”, ¿nos podrías contar un poco cuáles han sido tus andanzas hasta llegar a Decántalo para gestionar su catálogo de vinos?
Hice un cambio profesional, y de vida, hace 12 años. Me mudé a Barcelona a estudiar Viticultura y Enología en la Escuela Agraria d’Espiells. En las prácticas fuimos con un compañero a vendimiar a Beaune, en la Borgoña, y ahí empecé a entender la magnitud que tiene el mundo del vino, con sus cientos de “Crus” y perfiles de vino en una extensión tan concentrada y tan solo dos variedades principales de uva. En el segundo curso hicimos una visita a Galicia y al Bierzo y allí me sorprendió la cantidad de variedades de uva que había en el territorio y sus diferentes gustos.
Mientras estudiaba, solía ir a una tienda de vinos naturales en el barrio de Gràcia llamada el Ànima del ví, regentada por un parisino “loco”, Benoît Valée, que me decía que no hacía falta poner sulfuroso en el vino, que era lo contrario a todo lo que estaba aprendiendo. Un par de años después abrió el bar de vinos en el Born, donde cada día descubrías algo nuevo del vino natural.
Para finalizar los estudios, hice prácticas en una tienda de vinos, donde luego estuve trabajando un tiempo. Allí empecé a asistir a catas y a introducirme en la cultura del vino desde una visión más global. El siguiente paso fue el vínculo del vino con la restauración. Empecé en La Teca, de Vila Viniteca, donde establecí relación con viticultores y bodegueros y tuve la oportunidad de catar grandes vinos. Seguidamente pasé por Monvínic donde me encargué de seleccionar las copas del “bar à vins”, donde se amplió mi conocimiento sobre el atlas mundial del vino.
De Monvínic pasé a Decántalo, donde empecé trabajando el catálogo de vinos nacionales. Al cabo de 3 años vimos que había que dar el salto a la internacionalización de nuestra oferta, intentando ofrecer a nuestros clientes el mayor y amplio catálogo de vinos internacionales en el mercado online.
- Muchos te conocen más por “Pistacho'' que por Nacho Martinez. Se te ve muy cómodo con tu “nombre de batalla” pero ¿nos podrías contar cómo nació “Pistacho”?
Pues muy simple, una rima fácil para mi perfil vinícola. Y hasta aquí puedo leer...
-Has probado infinidad de vinos, has viajado a través de cientos de kilómetros con tu furgoneta para conocer “in situ” proyectos enológicos y denominaciones de origen. ¿Qué es lo que encontraste en las bodegas Comando G (Madrid) y 4 Kilos (Mallorca) que ha conseguido cautivarte tanto como para iniciar tu andanza en la elaboración de tus propios vinos con ellos?
Principalmente amistad; también compartir la visión sobre el mundo del vino y muchas, muchas botellas.
- Con 4 Kilos nació Moteur Pistache Rosé y hace muy poco vio la luz Comando Pistacho Cadausolo de los Vidrios, un vino rosado que elaboras con Comando G. Dos grandes bodegas que, de un tiempo a la fecha, están dando mucho de qué hablar (positivamente) pero ¿qué te ha hecho decidirte por la elaboración de dos vinos rosados? ¿Nos puedes hablar un poco sobre ellos?
Rosado porque quería emular a uno de los vinos que más me ha emocionado en esta vida, Valentini Cerasoulo d’Abruzzo 2008. Cerasoulo d’Abruzzo es una elaboración típica de esta región italiana para elaborar vinos rosados. De hecho, justo el verano pasado estuvimos con la furgoneta, y la bicicleta, conociendo esta región.
En ambos proyectos hemos intentado recrear la esencia de este vino reinterprentándolo con las características de cada región.
- Desde que te has involucrado directamente en la elaboración de vino ¿ha cambiado tu percepción a la hora de probar los vinos de otros proyectos y, sobre todo, al momento de tener que elegir, de entre tantos elaboradores -nacionales e internacionales- aquellos que formarán parte del catálogo de vinos de Decántalo?
Creo que no. Como responsable de un catálogo tan amplio hay que diferenciar tus propias preferencias de lo que pueden ser tendencias del mercado en cada momento. En todo caso, nuestro extenso catálogo recoge opciones para todo tipo de consumidor aunque, personalmente, me gusta mucho introducir vinos nuevos, diferentes y con mucha personalidad.
- A partir del estallido de la pandemia se ha incrementado el consumo de vinos en casa y, por ende, también ha aumentado la compra de vino a través de plataformas de venta online. ¿Crees que esta práctica llegó para quedarse? ¿Ha influido en la manera en la que Decántalo confecciona su oferta?
Definitivamente ha venido para quedarse en España, en los países del norte de Europa ya era una práctica habitual. Si que hemos notado un cambio en el perfil del comprador, gente más joven que busca vinos más frescos, ecológicos, naturales, etc. Lo que creo que veníamos preparándonos hace tiempo hacia este tipo de perfiles de vino.
- Dentro del catálogo de Decántalo existe la posibilidad cada vez más amplia de comprar vinos a partir de selecciones ya creadas. ¿Nos puedes contar cómo funcionan y de qué manera crees que esto ayuda al público consumidor a la hora de comprar?
Hacemos selecciones de vino por temáticas, perfiles, zonas, etc., para que la gente se pueda introducir con una base y, si le gusta, ir profundizando. En ellas intentamos que haya variedad dentro de la línea para que el consumidor se pueda hacer una idea bastante general.
Recorremos grandes zonas vitivinícolas españolas como Rioja o Priorat, hasta francesas e italianas como Burdeos o el Piamonte, donde podremos degustar la esencia de cada lugar.
Tenemos selecciones enfocadas en variedades internacionalizadas como Chardonnay o Syrah y podremos percibir los diferentes perfiles que proporciona una misma variedad en diferentes países y zonas.
Nuevas tendencias en la elaboración de vinos como los vinos naturales, donde el prisma de aromas y sabores se expande y abre un nuevo horizonte. Hasta una selección Decántalo, de los mejores vinos por debajo de 10€, donde podrás beber muy buenos vinos de gran placer.
Y muchas selecciones más que iremos añadiendo en esta sección para que el cliente de Decántalo pueda disfrutar de muchas y diferentes experiencias vinícolas.
- Inevitablemente y por cuestiones de trabajo sueles catar muchos vinos de diferentes estilos y procedencias pero cuando no estás trabajando, ¿qué te gusta beber por placer? ¿Tienes alguna predilección según tu estado de ánimo o de si estás solo o acompañado? ¿Qué tipo de vino no puede faltar en una reunión de amigos?
Me encanta beber vinos que provienen de personas. Cuando un vino me ha gustado, aparte de intentar conocer el lugar, también me gusta recabar información sobre el elaborador. Creo que los vinos a pequeña escala, las personas con sus vivencias, sapiencias y percepciones, imprimen mucho carácter al vino y los hacen únicos.
También vinos clásicos que se han mantenido fieles a su estilo y no han caído presos de las modas. Me viene a la cabeza Beppe Rinaldi, de Barolo, en el Piamonte que defendió hasta el final su visión del Barolo clásico, en contra del monocultivo de la vid en la zona, con maceraciones largas de las uvas y crianza en "Bottis" de Eslavonia y no en barricas francesas. Hoy en día sus hijas siguen con el legado intacto de su padre. Vinos difíciles de encontrar que dan la razón a esa tozudez con la que defendía su visión de interpretar el territorio donde nació.
Beber vino entre amigos es lo mejor de todo, ya que pueden caer muchas más botellas...hahaha. No, en serio, compartir botellas enriquece y las especiales siempre se beben en compañía. Es una de las grandes cualidades del vino, que es muy social. En estas reuniones del buen comer y beber siempre tienen cabida muchísimos vinos de muchos perfiles, pero con un hilo conductor: la autenticidad de los mismos.
- Para terminar, tú que por placer y por trabajo pruebas tantos vinos, ¿podrías compartir con nosotros cuál es el último vino que te ha emocionado y por qué?
Bufff… ¡Qué difícil! Disfruto mucho de los vinos que hacen las personas mas cercanas, ver como evolucionan y como cada año te sorprenden. Pero si tengo que quedarme con uno es Cappellano Barolo Piè Rupestris, ¡una Nebbiolo de estilo clásico e interminable!