La añada 2017 ha sido calificada como excelente por el consejo regulador. Un año marcado por la sequía y por las altas temperaturas que adelantaron la fecha de la vendimia.El otoño comenzó con temperaturas algo más altas de los normales pero con una pluviometría normal, no fue hasta finales de Noviembre cuando las temperaturas bajaron. El comienzo del año comenzó con temperaturas bajas y escasas precipitaciones, repentinamente las temperaturas comenzaron a subir y adelantó el desarrollo vegetativo y fenólico de la vid. A finales del mes de abril se produjo una intensa helada, un accidente climatológico grave que mermó la cosecha un 20%. El mes de mayo volvió a registrar temperaturas muy altas que adelantaron la floración y por consiguiente el adelanto de la vendimia, convirtiéndose en la más temprana hasta la fecha. Una añada donde se han podido extraer todos los componentes aromáticos de la uva y se ha preservado la acidez, imprescindible para aportar frescor al vino.
La añada 2016 calificada como muy buena comenzó con un otoño e invierno con unas temperaturas elevadas para estas estaciones que pronosticaban un adelanto del ciclo vegetativo de la vid. A comienzos de la primavera las temperaturas bajaron y las precipitaciones volvieron a cifras normales, lo que se tradujo en un ajuste en cuanto a fechas de brotación y floración. A inicios de junio llegó el calor y continuó todo el verano hasta comienzos de vendimia. En términos generales fue una añada lluviosa y algo cálida. Los vinos de esta añada se caracterizan por aromáticos y con una buena acidez. Donde los vinos en su juventud preservarán sus características aromáticas y frescas.
La añada 2015 fue calificada como muy buena en un año donde no se produjo ningún accidente climático. El otoño e invierno fue algo más cálido de lo normal pero con unas precipitaciones normales. En primavera el ciclo vegetativo comenzó con algunos días de antelación, pero las temperaturas y las lluvias prosiguieron con normalidad hasta la entrada del verano. Las fechas anteriores a la vendimia, las temperaturas se suavizaron y el final de maduración fue muy bueno. Los vinos de esta añada se caracterizan por un buen equilibrio entre madurez y acidez. Un buen perfil aromático que envejecerá correctamente.
Cata a la vista
Amarillo pajizo centelleante. Cata en nariz
De aromas complejos, es limpio. Combina notas citricas, de manzana verde y toques herbáceos. Cata en boca
Notas afrutadas y toques especiados. De buena acidez, es fresco y limpio. Final largo y perseverante.
Cata a la vista
Color amarillo con bordes acerados. Limpio y muy brillante. Lágrima glicérica. Cata en nariz
Muy sutil. Forma un gran conjunto aromático muy equilibrado y armónico. La característica fruta de hueso aparece acompañada de toques cítricos, elegantes notas cremosas, de bollería y especias (vainilla) y múltiples herbáceos frescos acaban de redondear el conjunto. Cata en boca
Muy buena entrada, amplia y envolvente. Textura untuosa, sedosa. Paso seco y fresco, sabroso, muy agradable. Con la fruta, los cítricos y los herbáceos intensos. Excelente acidez. Final muy persistente.
Cata a la vista
Amarillo pajizo con reflejos nacarados. Limpio y brillante. Cata en nariz
Elegantes y complejos aromas donde la fruta de hueso (melocotón) y los cítricos junto a las notas florales y algún toque ahumado, hacen que sea un vino muy expresivo. Cata en boca
Muy buena y amplia entrada. Sabroso y untuoso, con mayor presencia de cítricos. Buena acidez, fresco. Intenso y expresivo, con un final persistente acompañado de un postgusto afrutado y ligeramente amargo.